Una start-up con sede en Múnich ha aprovechado el sol bávaro de este verano boreal para probar la versión final del sistema de carga de su vehículo Sion, un hatchback compacto solar completamente eléctrico que puede cargarse mientras se conduce.
Alemania probablemente no pueda cumplir su objetivo de lanzar al mercado un millón de coches eléctricos para 2020, pero el Gobierno dijo en abril que estaba preparado para ofrecer apoyo a las compañías que fabrican baterías para vehículos eléctricos.
La producción comenzará en la segunda mitad de 2019 en una de sus plantas alemanas y la compañía tiene unos 5.000 pedidos que espera empezar a vender por poco más de USD 18.ooo el próximo año.
El Sion tendrá 330 células solares unidas al techo del vehículo, el capó y los laterales, y su sistema de batería tendrá un alcance de 250 kilómetros antes de que necesite ser recargado.
